El viento del desierto

Nosotros, ese exclusivo grupo de gente que sufre de migrañas, somos súper sensibles. Sensibles a los efectos del alcohol, del chocolate, del estrés…Que si dormimos de más, que si dormimos de menos… Y ojo con saltearse alguna comida!

Por si la lista fuera corta, también tenemos que agregar el clima: los cambios de clima también pueden desencadenar migrañas. ¡Y como! Por ejemplo, ayer acá en Israel tuvimos “obej”: un tipo de viento con arena y polvo, que es molesto para todos, pero especialmente para los alérgicos. Asi que me puse a buscar en Google acerca de la relacion viento de arena-migrana. Y encontré esto:

"El llamado mal viento también provoca dolores de cabeza y la migraña entre muchas personas. [...] En la montaña y el desierto, vientos cálidos y muy secos secan las membranas mucosas, irritan las vías respiratorias e ionizan el aire. Por ejemplo, las poblaciones de los países alpinos ssufren de dolor de cabeza y migraña cuando su viento föhn desciende de las montañas; los norteamericanos las padecen en los días chinook, los israelíes cuando sopla sharav o hay obej, y los australianos en días con vientos del este, oeste o norte, dependiendo de qué parte de la costa viven."

Asi que al parecer el viento puede también desencadenar migrañas, y la de ayer fue una “migraña climática”. Y por acá el "obej" continúa...

Me cuesta ser constante

Una de las cosas que me cuestan es ser constante. Por ejemplo en escribir este blog - ¡mi último post fue hace más de un año! Y lo mismo me pasa con las resoluciones, las cosas que me hacen bien, el ejercicio....Los empiezo con ganas y al poco tiempo quedan en el olvido.

La verdad que este último año no fue fácil. Tuve que despedirme de mi papá (de forma repentina) y de mi abuela, que pasaron para el otro mundo. De más está decir que estuve muy contenta de terminar el 2014 y darle la bienvenida al 2015. Y que los extraño a ambos :(.

En cuanto a las migrañas, me gustaría poder escribir que me curé, pero lamentablemente continúan, varias por mes y no sólo alrededor de "esos días". Así que tengo que reiniciar mi búsqueda de lo que me hace mal, bajar unos cuantos cambios y aceptar algunas cosas.

En el libro de Louise Hay “Puedes sanar tu vida” (You can heal your life) dice que la causa metafísica de la migraña es "Aversión a ser manejado y resistencia al fluir de la vida." Y no me suena tan loco, algo de eso debe haber. En los últimos años me he resistido bastante a algunos cambios: de país, de casa, de ritmo... Punto 1 – aprender a bajar un cambio, relajarme un poco.

Otra cosa que leí es una creencia que las personas que sufren de migraña tienen ciertos rasgos en común. No sé si otras personas con migraña coincidan también, pero yo me identifiqué con los siguientes rasgos:

• Tendencia a sentirse culpable
• Buscar que "haya paz"
• Tomarse las cosas a pecho
• Vivir a ritmo acelerado
• Tendencia a buscar la perfección en las situaciones y las cosas
• Tener dificultad en decir “no” y tratar de abarcar mucho

Lo que me lleva al punto 2 – quererme un poco más, aceptarme y ser más considerada conmigo misma, mis limitaciones y mis tiempos.

¿Y ustedes, que opinan de lo que leí? ¿Se identifican? Me encantaría leer sus comentarios :)

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